Todos los participantes añaden sus ideas, inspirados en eventos virtuales realizados en todo el mundo por los organizadores locales de cada ciudad. La ciudad con más ideas recibirá el premio a la ciudad más creativa.
Uno de los principales problemas que pude vivir en carne propia es que dentro de los grupos vulnerables, hay muchas personas excluidas de una u otra manera. Una mujer Sordociega llamada Helen Keller dijo que entre no ver y no oír, lo peor es no poder oír ¿Por qué? Porque no ver te impide ver objetos pero no oír, te vuelve un objeto. En este caso, viviendo en carne propia la discapacidad auditiva, tengo Hipoacusia (Baja Audición) y después de un intenso debate con una comunidad por las redes sociales, llegamos a la conclusión de que los barbijos nos impiden poder leer los labios. Que la sociedad no está preparada, hasta que se visibilice el tema. Por lo tanto el problema es que debemos además mantener una distancia de dos metros y nuestro rango de audición, nuestra "burbuja auditiva" es de un metro. En las redes sociales hay tal nivel de ansiedad general por el aislamiento que la gente recién compensar me comprende lo que es estar distanciado socialmente. La problemática está en que esta es la denominada "Discapacidad Invisible". Enfocar solución dependerá de quién lo vive en carne propia. También el otro problema es que las plataformas de videoconferencias están en auge y no son accesibles para personas con discapacidad auditiva.
Personas con discapacidad auditiva con capacidad de lectoescritura en la lengua castellana tanto de Bolivia como América Latina. Sordos e Hipoacúsicos.
Sordociegos dependiendo de las circunstancias.
La elaboración de barbijos transparentes y que su material pueda limpiarse fácilmente.
Complementa el uso de las apps del celular, de trabajaría la capacitación por vídeos para que la gente usuaria lo muestre a quienes lo requieran y de esa forma facilitar la accesibilidad requerida sin costo alguno, solo las indicaciones requeridas. El acceso éstos aprovechando que no hay ruido por la pandemia da ventaja de entender con el barbijo puesto inclusive. Falta hacerlo difundir y socializarlo.
Dispositivos de audición denominados bucles, aros magnéticos, y sistemas de frecuencia modulada, a bajo costo. Para los usuarios de audífonos e implantes cocleares.
Implementación de software que habilite la función de subtítulos desde cada pantalla.
Creación de centros de relevo en Bolivia para que se utilice el intérprete de lengua de señas boliviana desde el celular, autofinanciado por el Estado las 24 horas. Y gestionar en el resto de América Latina, para fines de acceso civil como búsqueda de atención médica, situaciones cotidianas complejas en la burocracia u otros.
El servicio además contará con financiación para los subtítulos en tiempo real, en inglés, portugués y español, por medio de una empresa que brinde subtítulos como interpretación. En este caso la única que se encuentre en América Latina está en Argentina. Pero hay otra de acceso a la mayoría de los países en habla inglesa. Entonces se puede gestionar el servicio en Bolivia para reducir costos y ser auto sustentable.
Para Sordociegos, se deberá contar con la lengua de señas boliviana en tacto, protactil, de manera que sume un servicio más dentro de lo mencionado.
En el caso de personas sordas, ellos pueden beneficiarse con el acceso a la lectoescritura a través de capacitación de profesionales en logogenia para alfabetizarlos sin importar la edad, el nivel de pérdida de audición o si usa o no audífonos. Hacer los cursos a distancia y capacitar a los demás capacitadores. De esta manera, no cobrar a los Sordos porque el 70% sufren analfabetismo y de éstos muy pocos consiguen trabajo. Entonces, la mayor parte de los Sordos son muy vulnerables por no contar con recursos y lo peor es la complicación de su desarrollo cognitivo pasados los primeros 5 años de edad de desarrollo de la lengua. Esto se denomina "deprivación lingüística".
Reducir las barreras comunicacionales y hasta lingüísticas de las personas con discapacidad auditiva.
Potenciar el costo-beneficio en su vida cotidiana dentro y fuera de la situación de pandemia.
Erradicar la desigualdad lingüística, social y comunicacional de las personas con discapacidad auditiva.
Otorgar accesibilidad comunicacional.